Durante los primeros días del mes de abril, comenzaron las clases en los institutos terciarios de toda la provincia de Buenos Aires. Lo que queremos contarles sucedió en los institutos de N°40 de la ciudad de Trenque Llauquen y en el instituto N° 71 de Pellegrini.
Cuentan que en las clases de ambos lugares se llevaban a cabo largas conversaciones que podríamos definir como angustiantes e inciertas. Especialmente en las clases de Prácticas de residencia. Había comenzado el aislamiento social, preventivo y obligatorio y se vislumbraba su duración por mucho tiempo.
Cuando muchas mentes comienzan a pensar en el mismo asunto todo se enriquece. Fue así que una profesora que tenía contacto con ambos institutos, separados por apenas 50 kilómetros, hizo la conexión.
Una conexión que resultó llena de sorpresas, alegría y emoción. Al sábado siguiente, todas las profesoras se reunieron en una de sala Zoom para pensar juntas. El primer punto en común fue que los grupos habían trabajado con un capítulo del libro de Mariana Maggio “La enseñanza poderosa”.
A partir de ahí, se recopilaron numerosos conceptos, frases, expresiones, que a las alumnas las inspiraban, les iluminaban las caras. Profesoras y alumnas se permitieron emocionarse juntas.
Luego, propusieron un encuentro uniendo a todas las alumnas. Para hacerlo prepararon la sala virtual, enviaron el enlace unos días antes, hasta que el gran día llegó. Eran dos pantallas de zoom repletas de caras. Debían rotar las pantallas, para verse entre todas.
Todas tuvieron un momento para hablar e intercambiar experiencias, reflexiones filosóficas y análisis pedagógicos. En esa pantalla también estuvieron Mariana Maggio, Inés Dussel, Paulo Freire y Jorge Larrosa, entre otros; quienes prestaron sus conceptos tan profundos que se pudieron resignificar en esta nueva situación límite: el aislamiento por la pandemia. Los protagonistas, por un momento, lograron olvidarse de los miedos y la angustia de estos tiempos. Cuentan y escriben que la adrenalina del encuentro duró en profesoras y alumnas unas cuatro horas. Esa emoción quedó expresada en redes sociales y en un padlet. Así como la alegría del encuentro continúa hasta nuestros días.
Tres rasgos principales de la propuesta
- Adaptación.
- Intercambio.
- Amplitud de visiones.
¿Qué diferencia esta propuesta de las que se hubieran hecho en la presencialidad?
La virtualidad hizo posible el encuentro.
Una idea fuerte para compartir
La unión puede con los inciertos
