🎧 Recomendamos que te pongas los auriculares y lo escuches haciendo lo que vos quieras.
Las ganas de hacer algo diferente, de salirse del molde, de cambiar de carril, de medio, de estado, fue el ingrediente principal para encarar este nuevo desafío, movidos por un equipo de mujeres inteligentes y audaces que están dispuestas a darlo todo para reinventarnos.
La instalación polifónica partió de los relatos de todos aquellos que vinculados con el mundo de la educación tuvieron el impulso de alzar su voz para compartirla con El Moviente. Bajo la consigna “Lo que la Pandemia nos dejó” se abría un canal para narrar algunos de los aprendizajes, las reflexiones, las ideas, pero sobre todo las sensaciones que estábamos transitando a partir del contexto del aislamiento social, preventivo y obligatorio (ASPO).
El audio de un minuto de duración podía ser sobre lo que cada uno considerara más relevante para compartir con los colegas. De ese modo, cada uno respondió a partir de sus experiencias como docentes, de sus preguntas como profesionales. También hubo estudiantes y directivos que se animaron a poner su voz. Sin dudas, las respuestas sorprendieron, en principio por condensación de las ideas que el tiempo acotado les invitó a realizar y a la vez por la singularidad de los relatos en voz de sus protagonistas. El lenguaje oral, el tono, la intensidad, el brillo y la cadencia de cada uno al grabarlo fueron un modo único de hacerse presentes.
Por otro lado, los relatos recibidos fueron de los más diversos en relación con el contenido, los hubo descriptivos sobre las nuevas condiciones de trabajo, los hubo reflexivos frente a los cambios en los vínculos con los estudiantes y con las familias; los hubo analíticos sobre los cambios instituciones motorizados a partir de este contexto; lo hubo propositivos sobre nuevas ideas para la reinvención.
¿Y que se hizo con todo ese contenido? Una de las opciones era sistematizar, ordenar por temas, por el rol que ocupa cada uno de los participantes dentro de la Institución, por tipo de aporte, pero entendimos que eso no tenía que ver con el sentido del moviente. No es ordenar o clasificar, no es juntar ni tampoco agrupar o arrimar, no es pegar ni cortar, es integrar para recrear. Lo que buscábamos era poner las voces en movimiento para intentar captar algo de la complejidad que surge en el encuentro. Nos interesaba resaltar el clima, producto de la espesura de tantas voces diciendo, cada una con su propia narrativa. Nos preocupaba poder dar cuenta de lo colectivo de la producción y por eso integramos la especialidad (Audio Binaural), construida a partir del sonido proveniente desde diferentes ángulos, con distintas distancias y volúmenes. Para finalizar nos parecía fundamental que la pieza invite al cuerpo a despertar, poniéndose en movimiento para dar mayor espacio al universo sensible y a la experiencia estética que sucede cuando aparece la posibilidad de la sintonía con la totalidad.